Por lo menos nueve perros callejeros fueron envenenados en calles de la colonia Francisco I. Madero, en el municipio mexiquense de Nicolás Romero. Los vecinos acusan que el responsable sería el dueño de una pollería, a quien supuestamente le robaban la mercancía.
Los hechos ocurrieron durante la tarde del 2 de agosto, cuando empleados de la pollería “Yaretzu” alimentaron a los perros con pollo crudo, el cual presuntamente estaba contaminado con algún tipo de veneno.
Minutos después, y entre aullidos de dolor, los lomitos comenzaron a caer con espuma en la boca, para morir inmediatamente tanto en los alrededores del negocio como en un lote baldío, ubicado frente a él.
“La Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México, en coordinación con la Fiscalía del Estado de México, atendió el caso de envenenamiento de perros en Nicolás Romero; inspectores acudieron al lugar para obtener los elementos que fueron aportados al Ministerio Público y que han sido integrados a la Carpeta de investigación ya iniciada”, detalló la dependencia en su cuenta oficial de Twitter.
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